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jueves, 24 de enero de 2013

Fin de Semana en Francia

El fin de semana pasado junto con un par de días libres al final se me han convertido en casi una semana de vacaciones.

Mi costillo y yo nos fuimos de visita familiar desde el jueves al lunes a Francia, en concreto a Rennes, y debe ser que todas esas alertas de nieve anunciadas para Madrid se quedaron por el norte, porque allí hemos sufrido un buen temporal, hemos pelado bien de frío, cancelaron el vuelo de vuelta del lunes y no pude coger otro hasta el miércoles.

Estas cosas suelen molestar mucho si te dejan tirado en el aeropuerto, pero como vi la cancelación el día anterior al viaje y tuve la suerte de estar bien recogida en una casa con todas las comodidades, pues no me quejé, 2 días de vacaciones más sin quererlo ni beberlo.



Así que como no hay mal que por bien no venga y aunque hacía mucho que no pasaba tanto frío, disfruté estupendamente de esos días.

De nuevo publico una entrada sin ninguna receta, pero es que no podía evitar enseñaros algunas de esas cosas tan estupendas que tienen por tierras galas, y sobre todo por esa bonita ciudad, Rennes.
Digo algunas cosas..., pero bueno, sobre todo me centro en las Galettes, ese rico plato típico de Bretaña que prácticamente no conocemos en España y del que yo ya hice esta publicación.

Sólo para recordaros, las Galettes son un tipo de Crep pero que no llevan huevo y se hacen con harina negra o sarracena. En esta foto se puede ver el tono oscurito de la masa.


Estuvimos comiendo en un pequeño restaurante muy bretón en el que sólo servían Galettes (y otro plato de la región que no recuerdo el nombre y que no pude pedir porque hay que avisar con antelación).

Otra cosa que podéis ver es esa especie de embutido redondo como con tiras, se llama Andouille y es muy típico en Francia, está hecha a base de tripas.
Confieso que la primera vez que la comí no me gustó mucho, pero poco a poco le voy cogiendo el puntillo ¡y esta Galette estaba deliciosa!. ¡Mirad qué rica se ve abierta! (champis, queso... mmmmh!)


La verdad es que los bretones dicen que una Galette llena de agujeros, no es una buena Galette...., pero vamos, como inculta de todo este tema a mí me pareció buenísima.

Como ya comenté en la entrada anterior, normalmente las Galettes se sirven como plato salado y los Crepes como plato dulce (que el Crep suele llevar un poco de azúcar), pero en este restaurante eran todo Galettes, incluído el dulce, eso no quitó que casi me comiera de un bocado esta Galette con chocolate, nata y Frangipane (otro ingrediente típico francés que es una especie de crema pastelera con almendras y que no se ve porque está dentro).



Una de las Galettes más típicas y muy bretona es la Galette Saucisse, es decir, la Galette de Salchicha. No es más que una salchicha (más bien parecida a una butifarrilla) envuelta por una Galette. Es increíble cómo algo tan sencillo y "soso" (de simple) pueda tener tantos fanáticos.

Aquí tengo un par de Galettes Saucisses que nos compramos para llevar antes de coger el tren a Paris en nuestro regreso.



En Francia todos los días son día de mercado ambulante, cada día es en un sitio de la ciudad distinto, y siempre tendrás un mercado al que ir donde te ofrecen todo tipo de productos.
Lo que no podía faltar en estos mercados, es que en una de las zonas te vas a encontrar con varios puestos de Galettes ambulantes donde la gente, pese al frío, hace cola para poder degustar, casi siempre, una estupenda Galette Saucisse.



domingo, 22 de enero de 2012

Laab, larb o laap

Esta es otra de esas recetas de mi viejo blog que aunque no la hice yo, no quería dejar de publicarla, ya que siempre me parece interesante conocer los platos típicos de otros países, y hechos de primera mano por alguien nativo (mi familia política, que vino de visita). Y tengo que decir, la comida asiática me encanta, y en España no hay prácticamente ningún sitio donde te la preparen en condiciones, y al decir asiática, no digo los chinos, ya que el resto de países tiene una gastronomía muy amplia, sana y buena.




El laab es una especie de ensalada de carne cruda originaria de Laos. Como a mí no me gusta mucho la idea de la carne cruda, mi suegrastra tuvo la amabilidad de cocinar un poco las tiras de carne, pero el plato de verdad es con carne cruda.

No pude seguir la receta ya que cuando llegué a casa ya estaba todo preparado.
Pero los ingredientes venían a ser algo así como, ternera cortada en tiras, cilantro, menta, cebolleta, arroz tostado y triturado, algo de picante y lima.

Normalmente se acompaña con arroz glutinoso, pero como su preparación ya es otra historia, y no tenemos los medios, en principio lo comimos poniéndolo en una hoja de lechuga, y luego con arroz basmati normal, mezclándolo todo.

Aunque en la foto parece que tiene un aspecto extraño (también ha que tener en cuenta que no soy para nada una experta fotógrafa), estaba realmente delicioso .

lunes, 9 de enero de 2012

De vuelta de China - Parte 5

Anda!! que me olvidé de publicar esto!! jajaja, qué desastre!! y es que ha pasado tanto tiempo que como ya no viene a cuento!, pero claro, como la tenía escrita, pues no voy a dejar de publicarla.

Por supuesto, no podía faltar publicar un mensaje hablando de las sopas.

La sopa suele ser el plato estrella en los países asiáticos, es muy normal ir por la calle y encontrarte chiringuitos dedicados exclusivamente a sopas, tienen sus distintos tipos de pasta de arroz fresca, un gran cacerolo de caldo y sus 4 hierbas, así que vas, pides tu sopa eligiendo el tipo de pasta (normalmente fideos), y luego sueles poder elegir ponerle carne (una carne super seca que parece que está hecha desde hace 3 días), más vegetales, huevo, y otras cosas que no se me ocurren.

Pero bueno, este es el ejemplo del chiringuito de calle, pero te ponen todo tipo sopas más "normales" (sin carne seca de hace 3 días) en todo tipo de restaurantes.



Esta sopa que veis en la foto la tomamos en uno de esos chiringuitos de calle, la foto se ve muy de cerca, y mejor no os cuento el estado de limpieza del entorno, tampoco voy a decir de qué estaba todo perdido porque  esa cerdada fue algo que me hizo pasar malos ratos esas vacaciones, y no quiero que os muráis de asco.
Y aunque tuvimos que comer con las mochilas sobre nuestras piernas y con cuidado que ni un cordel tocara el suelo, hay que confesar que la sopa estaba muy rica, con carne seca de hace 3 días, pero los fideos nos los hicieron allí mismo, es decir, cogieron la masa, lo amasaron, y no sé cómo, mágicamente, empezó a estirar, doblar, estirar, doblar, estirar, etc, y empezaron a salir un montón de fideos buenísimos.
mmmmh..., como nota un poco asquerosilla, vi cómo el hombre del chiringuito, según acabamos, escurrió los boles de sopa y los puso directamente en el montón de boles que usaba para servir al siguiente.




¡Sopas hasta para el desayuno! En la foto vemos un plato de empanadillas, que las adoré..., mmmmhhh!!, pero de eso ya hablé en la primera parte de Vuelta de China. El plato más oscuro es dulce, bueno, es raro..., es dulce pero no mucho, y llega a empalagar..., son unas bolas de arroz glutinoso y el caldo está hecho a base de té.
Y el otro bol es una sopa de Wantun. El Wantun frito lo ponen en los restaurantes chinos de España, lo probé una vez y me pareció horrible, es la misma masa que la de los rollitos, con una gotita de carne en el medio, doblado en forma de triángulo y frito, a mí me sabe al aceite que hace años que no cambian. Pero bueno, este de la sopa no tiene nada que ver con el que te ponen por aquí :).
Desayuno completo, no?? :D





Y cómo no, para los viajes qué mejor que una sopa instantánea, estas sopas existen en España, pero muchas veces te las compras para llevártelas a tu casa, allí ves que todo el mundo tiene una sopa de estas cuando estás en aeropuertos o estaciones. Todos los sitios públicos tienen máquinas de agua caliente y fría (no se puede beber agua de los grifos), así que tienes para beber, y para hacerte tus sopas y tés.
Por supuesto que nosotros no íbamos a ser menos, ahí está nuestra sopa mientras esperábamos el vuelo.





Lo último no son sopas, pero si es algo que esta gente compra mucho para ir de viaje, como las sopas. En las estaciones llegas a la típica tienda de chuches que siempre hay, y bueno, de primeras todo normal, chocolatinas, refrescos, etc. Pero te vas hacia un lado y descubres que la mitad de la tienda son este tipo de delicias!!!. Luego te vas fijando y ves por ahí chinos chupando patas de pollo como si fueran piruletas..., no, no me digné a probarlo..... .

Esta es la última entrega, espero que os haya gustado!!

martes, 4 de octubre de 2011

De Vuelta de China - Parte 4

Cada vez es más duro, quisiera seguir recapitulando el viaje, pero según pasan los días cada vez me olvido más que estuve de vacaciones... ¡¡arg!! ¡me quiero ir de vacaciones!, jajaja

Durante el viaje no saqué demasiadas fotos de comidas, así que ahora me van quedando cositas sueltas.

Hoy pasamos a Lijiang, una ciudad en la provincia de Yunnan. Esta provincia está justo al ladito del Tíbet, así que ya podemos ir disfrutando de paisajes super bonitos al lado de las montañas.

Sobre Lijiang lo cierto es que no sé muy bien qué decir, ya que es una ciudad que podría haber tenido mucho encanto. Digo "podría haber tenido" porque la ciudad antigua de Lijiang está formado por un entramado de callejuelas empedradas por las que está prohibida la circulación de vehículos, con canalitos y un montón de puentecitos de piedra, las casitas están todas construídas al modo tradicional en piedra y madera, y cuando entras dentro (nuestro hostel era en una) son super bonitas y encantadoras. El problema es que los chinos tienen una costumbre un poco mala de que cada sitio con encanto, convertirlo en una especie de parque temático para el turimos (sobre todo) nacional. Es decir, que paseas por las callejuelas, todo (absolutamente todo) son tiendas de souvenirs y te parece todo un poquito artificial.



Una de las callejuelas estaba dedicada exclusivamente a chiringuitos de comida, con planchas haciendo variedad de cosas, no tanta variedad como en los restaurantes porque no tenían woks, pero así para picotear un poco estaba bien. Eso sí, ¡si conseguías hacerte paso entre la marabunta de gente!

De paseo por los chiringuitos, nos encontramos este con estas exquisiteces:



No pude probarlos, pero mi chico se zampó una de esas de larvas (las marrones), confieso que lo intenté, pero según acercaba el palito a mi cara no pude... .
Por otro lado también tengo que confesar lo que vi. Cuando los europeos vamos a Asia y vemos estas cosas nos sorprendemos, le sacamos fotos e incluso algún atrevido lo prueba. Pero allí, donde el 95% del turismo era chino, la gente estaba exactamente igual: sorprendido, hacían muecas de asco, sacaban fotos, etc., pero nadie las probaba... . Yo le decía a mi pareja que estaban de adorno, que no sé por qué él las quería comer ¡si ni si quiera los chinos las comían! A saber cuánto tiempo llevaban allí..., porque estaban todos así resecos, excepto esa especie de panal que se ve al fondo que las tenía vivas, pero yo creo que eran de adorno.

Mi chico además de esta brocheta, días más tarde, en Beijing, se zampó una brocheta de escorpión, serpiente (eso lo probé, me sabía a merluza) y una estrella de mar (también lo probé, me supo a una especie de corteza reseca y aceitosa, con esa sensación de algo refrito después de días).


Siguiendo por la provincia de Yunnan, fuimos a otra ciudad que se llamaba Dali, esta ciudad nos gustó más, porque a pesar de conservar menos de esa ciudad antigua y tradicional, era más auténtica, no estaba tan explotada para el turismo chino, sino que estaba más llena de mochileros occidentales, entonces la ciudad se ha desarrollado de otra forma menos "artificial". 
La ciudad está situada al lado de un lago enorme, que tristemente no pudimos divisar bien ningún día porque durante los 20 días que estuvimos en China hubo una extraña neblina que no levantó.

Pero bueno, eso no quitó para que uno de los días hiciéramos una excursión por algunos puntos alrededor del lago, y llegamos a una de las cosas que a mí más me gustan en los viajes: los mercados.


Este mercado es en un pueblecito llamado Wase, el pueblo no tiene mucho en sí, pero el mercado tiene un montón de ambiente y color. Se hace sólo 2 días a la semana, así que tuvimos suerte.

Bueno, y por ahora no voy a contar más, que me está quedando una entrada un poco espesa!!.


miércoles, 21 de septiembre de 2011

De vuelta de China- Parte 3

Otra de las ciudades que visitamos fue Xi'An.
Realmente no sueles ir a esta ciudad por el sitio en sí, sino por visitar los Guerreros de Terracota, que son más de 7000 figuras hechas de terracota a tamaño real enterradas en el mausoleo del primer emperador de la dinastía Qing sobre el 200 antes de Cristo.


Xi'An, como muchas otras ciudades chinas no ha conservado mucho de interés o encanto, pero eso no quita que nos vayamos de paseo por las callejuelas hasta encontrar la zona de restaurantes y allí pararnos a comer.
Habíamos leído que Xi'An está situada en una zona donde se cultiva mucho trigo, por lo cual nos podemos encontrar múltiples restaurantes exclusivamente de sopas de tallarines y empanadillas (de las cuales ya hablé en la Parte 1).

Así que paseando y paseando, vimos muchos restaurantes sin saber muy bien a cuál entrar porque, por supuesto, todos tenían TODO escrito en chino (inglés cero patatero) y nos daba un poco de miedo de meternos a uno "especialmente raro". Y acabamos entrando a este pequeño restaurante:


Era d los más llenos, y esos super perolos para sopa que se ven en la puerta nos decían que el sitio debía estar bien.

Mi chico, dificultosamente consiguió pedir "algo", al volver a la mesa creía que había pedido fideos y empanadillas, pero no estaba muy seguro..., así que nos pusimos muy contentos al ver que a nuestra mesa llegó (más o menos) lo que queríamos (yo hubiera preferido las empanadillas solas, sin sopa, con un poco de vinagre). Y estaba espectacularmente bueno.


De todos modos en ese restaurante las chicas fueron muy amables, ya que tenías que pedir, pagar y cuando tu comida estaba lista pegaban un grito y tenías que levantarte a por tu comida, a nosotros nos la trajeron amablemente a la mesa porque no sabíamos qué estaban gritando (también hay que tener en cuenta que ellos se pasan el día gritando, así que al final no sabes qué gritan, a quién o por qué).




Mientras comíamos, pudimos ver justo detrás de nosotros una habitacioncita donde había 4 mujeres haciendo empanadillas, kilos y kilos de bolas de masa las tenían ya medio hechas, así que estaban ahí todas haciendo bolitas de carne y poniéndolas en sus obleas de masa, y de vez en cuando sacaban nueva.

Para el cómo hacían los fideos es un poco difícil de explicar, pero básicamente sacaban una bola de masa como de 40 cm de largo, se la ponían en el hombro, y con una cuchilla empezaba a sacar tiras de tallarines que caían directamente al caldero (como si tocara un violín).

Pues no sé si lo he dicho ya, pero la comida estuvo espectacular, y además, este fue el sitio donde me enamoré de las empanadillas y ya no pude parar de pedirlas en todo el viaje.

sábado, 17 de septiembre de 2011

De vuelta de China - Parte 2

El inicio y fin de nuestras vacaciones fue en Pekin.
Elegimos Pekin en vez de Shanghai porque tenemos unos amigos franceses viviendo allí desde hace un par de años, así que por supuesto, teníamos que ir a visitarles.

Nosotros visitarles, y ellos alojarnos, guiarnos y ayudarnos estupendamente.
Una de las primeras noches, nos llevaron a cenar a un restaurante para probar el muy conocido de nombre pero nunca probado pato a la pekinesa o pato laqueado.

Tuvimos que esperar unos 40 minutos a que el pato estuviera listo, no sé si ese es el tiempo de preparación, o simplemente los tienen medio hechos y esa es la lista de espera para poder tener el tuyo. Pero bueno, la espera también merece la pena, porque un pato da para muy poco (éramos 4), así que pedimos otras cositas ricas para ir cenando.

Cuando te traen el pato, te lo traen entero, te lo presentan y lo cortan delante de ti:


Te ponen 3 platitos con las rodajitas del pato, dos con las pechugas, muslos, etc, vamos, lo que es la chicha, y luego otro con la cabeza partida en dos y pieles.

Con el pato te ponen esta fuente:


En los individuales tienes verduras (puerro, pepino, cebolla, zanahoria) y también tienes un par de salsas que no sé de qué eran. En el recipiente de bambú del centro, tienes una especie de crepes o tortitas en las que enrollas el pato con los acompañamientos que quieras. Quedaría algo así:

Foto sacada de la Wikipedia

Estaba bueno, y siempre es probar cosas nuevas y sobre todo probar las cosas más típicas posibles. Hay que decir que esto no fue lo más bueno que probamos en todo el viaje.

Yendo por la calle veías muchas de tiendecitas con patos rojos tiesos colgados, yo creo que estaban hechos en el mismo estilo para comprarlos y llevarlos a casa.

domingo, 11 de septiembre de 2011

De vuelta de China - Parte 1

Pues aquí estamos, recién vueltos (snif... :'( ). Llegamos ayer a medio día, y de momento parece que vamos superando sin problemas el jet lag.

Aprovecho la tarde tranquila de domingo para descansar, organizar la casa y las 40 lavadoras que tenemos que poner, escribir este post y a ver si luego me queda un ratito para empezar a ponerme al día con los blogs que sigo.

Estas 3 últimas semanas las hemos pasado en China, tengo que ser sincera, y el país en sí nos ha decepcionado un poco en distintos aspectos. Hemos viajado ya a varios países asiáticos y aquí no nos hemos encontrado nada de lo que nos esperábamos, China es bastante distinto a sus países vecinos. Pero bueno, eso no quita que no hayamos disfrutado de las vacaciones, hemos pateado hasta el agotamiento, visitado y sobre todo recorrido muchos kilómetros en un país tan grande, de una punta a otra.

Y por supuesto, ¡hemos comido muchísimo!. Me han dicho muchas veces que la comida que solemos comer en los restaurantes chinos no tiene nada que ver con la que realmente hacen en China, y..., pues no sé, es que muchas de las cosas que hemos probado (y que también las he visto en España), me han sabido muy parecidas.... . La diferencia principal que he encontrado con nuestros restaurantes chinos, es que la cantidad de distintos platos que te pueden preparar es increíble.

Uno de mis platos estrella, es decir, ese plato que te gusta tanto y que lo intentas comer tantas veces como puedas porque sabes que va a pasar un buen tiempo hasta que pruebes algo tan bueno, han sido los... ¿cómo llamarlos? dumplings, raviolis, empanadillas.... , son eso, una especie de empanadilla rellena, normalmente de carne, aunque también los hemos probado de espinacas y de gambas. Se suelen hacer al vapor, aunque también los encuentras a la plancha o en sopas. Yo los prefería solos al vapor, luego te ponen un poco de vinagre ¿de arroz? para remojarlos, y estaban deliciosos!!. Sobre todo en un par de sitios que descubrimos, uno en Xi'an, y otro en Suzhou.

Tampoco se quedaban nada cortas estas de la foto, las comíamos en un sitio en Dali, en la provincia de Yunnan.


Lo más extraño cuando las pedíamos era que eran el único plato que traían de la calle, no entendíamos por qué, hasta que un día nos dimos cuenta que casi enfrente de este restaurante había otro más pequeñito que prácticamente sólo tenía empanadillas de estas. Así que el último día que estuvimos en Dali, compramos una bolsita de 10 en ese pequeño sitio para llevarlas para la cena en el tren de noche que habíamos cogido para ir a nuestro siguiente destino.


Espero poder llegar a encontrar en Madrid unos tan buenos como estos...
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